A la hora de adquirir una vivienda, lo habitual es que todo el proceso de compraventa comience con una oferta inicial, ya sea del vendedor o del comprador. No obstante, no es usual que con una sola oferta ambas partes estén de acuerdo y la compraventa se cierre con éxito. De hecho, las negociaciones entre vendedor y comprador pueden durar días, semanas o, incluso, meses.
El vehículo para llevar a cabo esta negociación es la contraoferta, una nueva oferta lanzada a través de una carta de contraoferta inmobiliaria por alguna de las partes que contradice la primera oferta. Lo más normal es gestionar el proceso de negociación a través de expertos en el sector inmobiliario, tal es el caso de agentes inmobiliarios que sepan cómo hacer que te bajen el precio de una casa y cómo negociar la compra del piso. Sin duda, la mejor opción para conseguir alcanzar con éxito un acuerdo entre el comprador y el vendedor es acudir y utilizar los servicios de una buena consultoría inmobiliaria que cuente con profesionales expertos en estas cuestiones, y que conozcan las vicisitudes del mercado inmobiliario. En cualquier caso, es fundamental saber cómo hacer una contraoferta.
¿Por qué llevar a cabo una contraoferta?
Lo habitual es que los compradores realicen una contraoferta una vez han visto el inmueble y han comprobado su estado. En cualquier caso, es muy común no solo la negociación del precio de la vivienda, sino también las fechas de cierre en un proceso de compraventa. Además, se ha de tener en cuenta que lo más común es que los vendedores ofrezcan precios superiores a los del mercado, ya que cuentan con las posibles contraofertas que harán los compradores para rebajar dicho precio.
Esto significa que hacer una contraoferta no solo puede suponer conseguir un precio más atractivo para adquirir la vivienda, sino también conseguir fechas de cierre del proceso de compraventa más próximas, de forma que el vendedor no tenga que esperar mucho tiempo para mudarse a su nuevo hogar.
En cualquier caso, se deberá tener en cuenta que, si la contraoferta está muy por debajo del precio ofertado, lo más frecuente es que el vendedor la rechace, sobre todo, si cuenta con el asesoramiento de un agente inmobiliario, que filtrará las mejores ofertas para su cliente y lo pondrá en contacto con los mejores oferentes.
Claves para negociar y presentar una contraoferta inmobiliaria
Comprar una vivienda no es un proceso sencillo, ya que no vale con establecer un precio y dar por sentado que ambas partes estarán de acuerdo con las condiciones de la operación. Lo más habitual es que se produzca un proceso de negociación en el que es fundamental saber algunas claves para saber cómo negociar el precio de una casa y presentar una carta contraoferta inmobiliaria, y llegar a un acuerdo con éxito sobre la compraventa del inmueble.
Para obtener un precio justo por la vivienda y hacer una contraoferta susceptible de ser aceptada por el vendedor, es conveniente tener en cuenta algunas claves o factores. Son las siguientes.
Ten en cuenta el estado de la vivienda
Lo primero que se ha de llevar a cabo es visitar el inmueble para comprobar en qué estado se encuentra y si cumple con todos los requisitos. Una vez el comprador ha verificado que la vivienda está en buen estado, es imprescindible ofrecer un precio justo que se corresponda con el estado del inmueble.
Determina un presupuesto para la compra de la vivienda
Antes de negociar con el vendedor, es importante determinar un presupuesto para la compra de la vivienda que se ajuste a las finanzas personales del vendedor. Es indispensable fijar el precio máximo que se podría pagar por el inmueble.
Aunque lo habitual es que la mayoría de los compradores necesiten solicitar una hipoteca para poder pagar el inmueble. Se ha de tener en cuenta que hay que pagar las cuotas hipotecarias y que, en cualquier caso, el comprador deberá poder hacer frente al pago de la entrada de la casa, que suele ser de entre el 20 % y el 30 % del valor de la vivienda.
Realiza una contraoferta razonable
Una vez se conozca el valor real de la vivienda y se haya determinado el precio máximo que se está dispuesto a pagar, el comprador deberá hacer una contraoferta justa y razonable, tanto para él como para el vendedor.
Así pues, si el comprador realiza una contraoferta por debajo del precio de mercado de la vivienda, es muy probable que el vendedor no quiera cerrar la operación.
Determina límites temporales
Es posible que el vendedor quiera alargar el proceso de negociación a la espera de que aparezcan nuevos vendedores que estén dispuestos a pagar más por la vivienda. Es por ello por lo que es de vital importancia que el comprador determine unos límites temporales para el proceso de negociación, de forma que este sea eficaz y no se alargue demasiado.
Lo habitual es que se dé un margen de entre 4 y 6 días para que el vendedor pueda analizar y decidir si acepta o no la contraoferta del comprador.
En cualquier caso, para que un proceso de compraventa resulte exitoso es importante contar con los servicios de expertos en el mercado inmobiliario que sepan guiar a ambas partes durante todo el proceso. Saber cómo hacer una contraoferta inmobiliaria es muy importante para conseguir un mejor precio, por eso si tienes preguntas acerca de este tema, desde Inversión Madrid te ofrecemos la mejor asesoría inmobiliaria del mercado.
